En esta ocasión os presento el espectacular reciclado de un anticuado barril de vino, que no aportaba mucho decorativamente, en una original lámpara que puede hacer las delicias de los amantes del vino, o de personas que disfruten de poseer objetos exclusivos.
No hice ninguna foto del antes de esta pieza, pero no fué difícil encontrar una de un modelo muy similar en la red.
Como podeis observar nada que ver con su estado anterior, quizá esta es una de las mayores metamorfosis logradas hasta la fecha en este blog.
El proceso fue algo complicado, ya que conseguir que las duelas (cada una de las piezas de madera que conforman el cuerpo del barril) se sostuvieran en su posicion fue algo dificil de acometer.
Pero comencemos por el principio, lo primero fue desmontar el barril, con ayuda de un destornillador plano y un martillo. Solo tuve que golpear las virolas (los aros que comprimen y sujetan las duelas) hasta sacarlas de su posicion, y todas las duelas se desmoronaron inmediatamente.
Luego un profundo tratamiento de limpieza, que comenzó por cepillar una a una las duelas por todas las caras, eliminando los residuos de vino y las partes más deterioradas de la madera.
Con este proceso aparte de la limpieza, añadi una bonita textura resaltando la veta a la madera, acentuando así el acabado en bruto de la madera.
Para sujetar las duelas en su nueva posición, utilice las propias virolas del barril, perforadas adecuadamente y atornilladas entre sí. Con esto se consiguió una fuerte estructura.
Una vez terminado apliqué un blanqueante para limpiar y unificar el color de la madera, después la teñí con betún de judea, matizando aún más la textura veteada y dando un bonito tono a esta noble madera de roble.
Madera blanqueada Madera teñida
Muy interesante. La verdad es que las cosas más simples se pueden transformar, con un buen trabajo, en cosas muy bellas.
ResponderEliminarUn 10!
Esto es ser creativo!!
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